martes, abril 12, 2005

Supernanny

Una de las tareas urgentes con las que se topara el nuevo Papa tras su elección en el cónclave de la semana que viene será la anatemización de un nuevo anticonceptivo, mucho más expeditivo e implacable que ninguno de los conocidos: Supernanny, el programa del canal británico Channel 4 cuya nueva temporada comenzó la semana pasada con su emisión los martes a las nueve de la noche.

Y es que basta ver un solo episodio de este programa para que a uno se le quiten por completo las ganas de tener hijos. En cada episodio, se nos presenta a una familia desbordada por los hijos más intratables y desobedientes que uno puede imaginar: niños violentos que pegan a sus hermanos, monstruos que no paran de decir tacos y soltar los insultos más horrendos a sus madres, renacuajos que si se les lleva la contraria prorrumpen en rabietas terribles... Pero no hay demonio que se le resista a la supernanny Jo Frost, protagonista de la serie. Esta superniñera pasa unos días con con la familia enseñando a los padres técnicas para educar a los hijos, mantener la disciplina y mejorar el ambiente familiar; el programa nos va mostrando el progreso de reeducación de los hijos (y de los padres) hasta que al final la situación se encauza y los chavales aprenden a comportarse mejor.

Este programa fue un éxito mayúsculo el año pasado el Reino Unido y ha sido exportado ya a EE UU. Yo lo vi por primera vez la semana pasada, y me dejó entusiasmado. Las técnicas que enseña Jo Frost, a juzgar por el programa, son muy efectivas. Pese a lo que se pueda pensar, "disciplina", esa palabra que tan mala fama tiene en nuestro tiempo, no significa tratar a los niños como si fueran reclutas de un cuartel, o someterlos a castigo físico con azotes. Jo Frost recomienda tratar a los chavales como personas: ponerse en cuclillas al regañarlos para estar a su altura, no perder la calma con ellos, poner castigos justos y tratar por todos los medios de que entiendan cuándo se están portando mal y por qué.

El otro día hablaba de cómo la televisión puede representar un papel positivo y útil para la sociedad, y que en ningún modo es un medio de comunicación perverso por naturaleza; Supernanny es otro ejemplo rotundo. Un programa entretenido, interesantísimo, original y educativo. Espero que lo trasladen pronto a España.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿ Tiene bibliografía JO FROST.?